Rogelio Lara
En el panorama político de Tlaxcala, los partidos Acción Nacional (PAN) y Revolucionario Institucional (PRI) han adoptado posturas divergentes respecto a posibles alianzas de cara a las próximas elecciones. Mientras el PAN cierra filas y descarta cualquier coalición con Morena, el PRI se muestra abierto a establecer acuerdos con diversas fuerzas políticas, incluida la Cuarta Transformación.

Ángelo Gutiérrez Hernández, dirigente estatal del PAN, ha sido enfático al señalar que su partido no contempla en ningún escenario una alianza con Morena. Sin embargo, ha manifestado disposición para explorar acuerdos con otros institutos políticos, incluyendo al Partido del Trabajo (PT), tradicional aliado del morenismo. Gutiérrez Hernández subraya que la apuesta principal del PAN es por liderazgos ciudadanos y que, aunque actualmente son la segunda fuerza electoral en el estado, buscan fortalecer su oferta política con el respaldo de la ciudadanía.

Por otro lado, Enrique Padilla Sánchez, líder del PRI en Tlaxcala, ha adoptado una postura más inclusiva, asegurando que su partido no cierra la puerta a ninguna fuerza política, incluida Morena. Padilla Sánchez enfatiza que el PRI está dispuesto a colaborar con cualquier grupo político, siempre y cuando ello beneficie a Tlaxcala. Esta apertura sugiere que el PRI busca mantenerse relevante en la contienda electoral, aunque esta visión no es compartida por todas las figuras del tricolor.

En contraste, el Partido de la Revolución Democrática (PRD) en Tlaxcala ha decidido no formar alianzas con el PRI y el PAN para las elecciones locales de 2027. El dirigente estatal del PRD, Julio César Pérez González, ha señalado que, aunque se han reunido con dirigentes de estos partidos, no existe la posibilidad de trabajar juntos en el ámbito local.

Estas decisiones reflejan estrategias divergentes entre los partidos tradicionales de Tlaxcala. Mientras el PAN opta por una coalición selectiva y se distancia de Morena, el PRI se muestra dispuesto a negociar con diversas fuerzas políticas, buscando mantenerse vigente en el escenario electoral. Por su parte, el PRD ha decidido competir de manera independiente en las próximas elecciones locales, marcando una clara separación de sus antiguos aliados.

Con estas posturas, el panorama político en Tlaxcala se perfila como un escenario dinámico y competitivo, donde las alianzas y estrategias de cada partido jugarán un papel crucial en las elecciones venideras.