Rogelio Lara|
•El presidente de la comunidad de San Cosme, San Pablo del Monte, muestra una falta de ideales y congruencia al cambiar constantemente de partido político.

En una sorprendente muestra de falta de principios políticos, el presidente de la comunidad del barrio de San Cosme, en el municipio de San Pablo del Monte, ha dejado perplejos a sus compañeros al cambiar de partido político más rápido que el cambio de estaciones.

El señor en cuestión, cuyo nombre no necesita ser mencionado para preservar lo poco que queda de su reputación, recientemente se autoproclamó aliado del moribundo perredismo local. Sin embargo, para desconcierto de muchos, fue visto en un evento público cortando el listón de un recalentado de carnaval junto a la posible candidata del Partido Verde Ecologista.

Pero eso no es todo. Parece que su apetito por el poder y los favores municipales no conoce límites, ya que logró convencer a su secretaria para que lo acompañara, a pesar de que ella misma es la candidata de Morena por el mismo barrio donde él ostenta el cargo de presidente en funciones.

Este episodio de voluble politiquería no solo demuestra una falta de lealtad hacia cualquier partido político, sino también una falta de respeto hacia los ciudadanos a quienes supuestamente representa. Además, su negligencia en el desempeño de sus funciones como presidente comunitario, incluido el descubrimiento de que el vehículo asignado para la recolección de basura era alquilado, solo añade más manchas a su ya cuestionable historial.

En resumen, la conducta errática y deshonesta de este presidente comunitario solo sirve para recordarnos la importancia de la integridad y la consistencia en la política local, y la necesidad urgente de líderes comprometidos con un ideal y una visión clara para el bienestar de su comunidad